Tres mujeres. Tres etapas. Tres momentos. Una mujer adolescente hace frente a un embarazo indeseado; una mujer pierde a su amiga de toda la vida; una mujer se enamora a los cincuenta. Este es el contenido, minimizado, extractado ad summum, de ‘La trilogía de París’ (Ed. Lumen), una novela, en realidad tres nouvelles, como las tres mujeres, las tres etapas, los tres momentos, que Colombe Schneck (París, 1966) escribió hace un tiempo y que ahora se publican en nuestro país, reunidas en un solo volumen.
Nada más comenzar ya apreciamos, especialmente en ‘Diecisiete años’, la
primera nouvelle, el estilo dinámico, fluido y acelerado, no sé si
voluntariamente o no, que Schneck utiliza. Hay prisa por transmitir al lector todo
lo que la escritora francesa quiere contar, ¿lo que guarda en su interior?
Quizá por eso concibió tres obras cortas y no una sola, más larga, aunque las
tres comparten protagonista: ella misma. El género breve parece propiciar
lecturas rápidas, muy apropiadas para las prisas que consumimos. En este caso,
además, da la impresión de que a la autora le urge contarlo. Para ello se vale
de capítulos cortos, frases cortas, ritmo ansioso. Como si su mochila le pesase
mucho y quisiera aligerar su contenido. Abunda en esa idea el hecho de que está
escrita en primera persona, en un ejercicio de autoexploración, en el que la
protagonista descubre, con horror, lo que significa crecer, dar los pasos para
convertirse en una mujer, y experimentar las sensaciones que transmite su
cuerpo tras un embarazo y un aborto. Sin despreciar las consecuencias.